El procesamiento del grano seco es una actividad que puede beneficiar a muchas personas. En Equipos Gastronómicos Precisur, podremos conocer cuáles son las mejores opciones para que puedas llevar a cabo esta tarea. Entre las ventajas que tiene de adquirir un molino de granos secos es disfrutar de la frescura de harinas que no están en lo absoluto procesadas y que pueden hacer de tus preparaciones opciones más orgánicas. ¿Quieres conocer más? ¡Aquí te traemos excelentes recomendaciones!
El molino de granos secos es un instrumento o herramienta de cocina ampliamente utilizada en el mundo. Puedes encontrarlo tanto en modelos caseros, así como en versiones industriales. Las cuales su tamaño y capacidad puede ayudarte a realizar tareas de venta al mayor a lo largo del tiempo e iniciar tu propio negocio.
Los molinos de granos secos caseros, son de baja capacidad y pueden dar respuesta a la necesidad y el beneficio de alimentos de baja demanda. Tal y como lo puede ser una familia de 4 a 5 personas. Puedes encontrarlos en diversas versiones como lo son manuales y automáticas. Esto te permitirá efectuar con mayor facilidad diferentes tareas.
Los modernos molinos de granos de mostrador facilitan que cualquiera pueda moler harinas frescas y sabrosas. Hay docenas de molinos de harina para elegir. Afortunadamente, la búsqueda de un molino ideal puede comenzar con tres decisiones básicas: qué fuente de energía usar, el mecanismo de molienda apropiado y la temperatura máxima de la harina que se debe tolerar. Muchos molinos son apropiados para uso familiar, así como para un negocio autónomo. La decisión se reduce al precio, la calidad, la versatilidad y las características de conveniencia.
Molinos Manuales. Ideales para la persona enérgica, atlética y disciplinada, un molino manual (particularmente el tipo de volante grande) puede ser una excelente opción, con pocas posibilidades de acumulación de calor que dañe los nutrientes. Pero la mayoría de los molinos manuales requieren trabajo, así que sea realista: si no hay harina, no puede haber pan.
Molinos eléctricos. Si el objetivo principal es moler la harina y poner el pan en la mesa sin complicaciones, lujos ni fanfarrias, entonces el principal inconveniente de un molinillo eléctrico (pérdida de uso durante los cortes de energía) puede ser aceptablemente raro. Los molinos más rápidos, limpios y fáciles de esta categoría son relativamente económicos y hacen un gran trabajo, luego vuelven al armario.
Molinos convertibles. Muchos fabricantes de molinos han ideado formas de hacer que sus molinos se conviertan de manuales a eléctricos o viceversa, de modo que la molienda continúe con o sin energía. Es importante seleccionar un molino convertible que funcione correctamente en cualquier modo porque algunos no lo hacen.
Cada molino de granos tiene algún mecanismo para triturar, batir o moler el grano en harina, generalmente en una variedad de texturas, desde gruesas hasta finas. Algunos mecanismos son más versátiles que otros: muelen elementos duros, blandos, aceitosos o húmedos. Aparte del “rodillo de avena” cada vez más popular, dos mecanismos de fresado dominan el mercado de los molinos domésticos: rebabas e impacto.
Los molinos de grano seco son los más comunes. Tienen dos platos de molienda, uno fijo y el otro girado por una fuente de energía. El grano se introduce en un espacio entre las rebabas, que están ranuradas para ayudar a cortar y triturar el grano. Las rebabas de piedra compuesta se construyen presionando piedras naturales o artificiales (y, a veces, cuchillas para cortar metal) en un lecho de cemento. Las rebabas/placas de metal, algunas de las cuales son planas y otras en forma de cono, están construidas con acero fundido endurecido u otro metal. Básicamente, el grano tiene contacto con la piedra que tienden a aplastar el grano y las rebabas de metal tienden a romperlo y cortarlo.
Los molinos de grano seco que se emplean dos cabezas planas de acero inoxidable con filas concéntricas de «dientes» que giran entre sí a altas velocidades. El grano cae en el mecanismo y se martilla, en lugar de moler, en harina. Estos molinos eléctricos muy rápidos y eficientes manejan la mayoría de los granos secos y no aceitosos, pero solo pueden producir harinas finas, no gruesas.
El molino de grano seco realmente hace que este trabajo sea rápido. Simplemente activa el interruptor, vierte los granos en la tolva y observa cómo se disparan hacia el tazón. Literalmente, solo toma uno o dos minutos. Pan comido.
Lo que realmente diferencia al molino de grano seco de aquellos que trituran granos húmedos fue la capacidad de ajustar el grano a la configuración exacta. Los molinos de grano húmedo solo tienen tres configuraciones. Con el molino de grano seco se puede ajustar exactamente a lo que se necesita y quieren.
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