En Equipos Gastronómicos Precisur contamos con un amplio catálogo de hornos polleros. Con ellos se prepara el reconocido pollo a la brasa, platillo típico de la gastronomía donde se deja macerar el pollo en un aderezo para no perder la humedad durante la cocción. Es por ello que son una inversión necesaria para cualquier restaurante, hotel o empresa que ofrece servicio de catering. Con estos equipos se garantiza mantener todos los sabores y la jugosidad del pollo. Para obtener más información sobre nuestros productos y servicios, contáctanos a través de WhatsApp o llámanos.
Tenemos hornos polleros con distintas capacidades, desde 15 hasta 30 pollos en promedio. Además, durante el proceso de compra ofrecemos asesoría técnica profesional, para que nuestros clientes elijan correctamente según las necesidades de sus negocios.
Garantizamos la adquisición de productos que cumplen con las más exigentes normas de calidad y seguridad. Asimismo, contamos con un amplio stock de productos y también precios asequibles.
Los hornos polleros son un tipo de equipo gastronómico cuyo diseño está adaptado para facilitar el asado de pollos enteros. Es decir, es un tipo de horno cuyo interior encontramos un sistema especial en donde se colocan los pollos enteros. Además, se les va haciendo girar a medida que avanza el proceso de cocción.
Estos son equipos de trabajo ideales para restauración y hostelería, en donde se ofrece al público un menú especial de pollo a la brasa. Además, con su utilización se hace más rápido el proceso, así como también más seguro. También cuentan con una serie de funcionalidades fácilmente programables, con las que se tiene un mayor control sobre la cocción. Significa que es posible cocina del pollo a una temperatura y en un tiempo previamente determinado con exactitud.
Actualmente, hay una amplia oferta de estos equipos, que vienen en distintos modelos y capacidades. Cada uno de ellos trata de adaptarse a las necesidades y exigencias de cada negocio. Generalmente, los hornos polleros permiten cocinar varios pollos a la vez, obteniendo como resultado pollos cuyo interior es jugoso y su corteza exterior está crujiente.
Hay hornos polleros con distintas capacidades, desde 12 hasta 30 pollos enteros en promedio. Pero también están los de mayor tamaño, que permite cocinar hasta 48 pollos enteros. Cada uno de estos modelos está pensado para adaptarse a las necesidades de distintos negocios, en donde se atienden los pedidos de una cantidad determinada de comensales al día.
Sus estructuras son robustas y se fabrican en metal enchapado con acero inoxidable. También se emplean otros materiales que poseen la misma resistencia y durabilidad. Además, cuentan con un cerramiento hermético que es generalmente una puerta fabricada en vidrio templado, cuyo marco es de acero inoxidable.
En su interior encontramos un sistema rotativo, el cual está especialmente diseñado para hacer girar los pollos a una velocidad determinada mientras se hace el proceso de cocción. En cada modelo dicho sistema posee distintas características, en cuanto a su distribución y en cómo se deben colocar los pollos (posición horizontal o vertical). Generalmente, se utiliza una varilla de acero trefilado, el cual se debe insertar en el pollo y sirve de eje central para hacerlo girar.
Ciertos modelos utilizan el carbón para generar la temperatura, pero también hay otros que utilizan gas propano. Cada uno ofrece distintas ventajas y desventajas en cuanto a cómo es su funcionamiento y cómo se adapta a las necesidades de cada usuario.
Los modelos a carbón cuentan con un compartimento en donde se coloca el carbón, cerca del mismo hay un cajón cenicero en la parte inferior. El tamaño es diferente en cada caso. En cambio, los modelos a gas tienen un sistema diferente, que debe conectarse directamente al sistema de distribución del gas que está en la cocina.
Continuación se hace mención de los diferentes modelos de hornos polleros que se pueden conseguir en el mercado. Son los siguientes:
Ciertos hornos cuentan con otros elementos extra que son muy útiles en la cocina. Por ejemplo, algunos modelos cuentan con un módulo independiente que es una freidora de papas, en donde se pueden colocar de una hasta dos canastillas. En cambio, en otros modelos podemos encontrar una parrilla o plancha de metal.
Estos equipos gastronómicos se deben elegir en función de las necesidades de cada negocio. Actualmente, en el mercado encontramos modelos especialmente diseñados para restaurantes especializados en la venta de pollo a la brasa. Pero también hay otros que se adapta mejor a las necesidades en hostelería y empresas de catering. Significa que las capacidades de producción son diferentes en cada caso.
El primer consejo consiste en elegir el modelo que permitan cocinar pollos enteros según el número de unidades por cocción. Además, el diseño de sus estructuras ha sido especialmente adaptado al tamaño y peso promedio de los pollos. Algunos modelos de menor capacidad son los de 12 a 15 pollos, mientras que los más grandes son los de 30 a 48 pollos.
Otro aspecto a tener en cuenta es el sistema con el cual funcionan, ya que modelos a carbón y modelos gas. Cada uno ofrece distintas opciones en cuanto a la capacidad máxima de temperatura que pueden alcanzar. En promedio, la mayoría de los modelos son de 300 ºC hasta los 500 ºC, pero también hay de otras medidas.
También hay que valorar el consumo energético de estos equipos, ya que su uso debe ser rentable para el negocio. Asimismo, sus sistemas también deben de garantizar una cocción uniforme, para que el pollo mantenga su interior jugoso sin perder el sabor. Mientras que la parte externa está totalmente cocinada, con la piel crujiente pero sin quemar.
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